¿Cuál es el mejor material para un piercing?

Los piercings han alcanzado un estatus de moda que los sitúan en el centro de muchos looks, robando el protagonismo a otras piezas de joyería antaño más populares. Pero no solamente son una forma de adornar el cuerpo, sino que los piercings han emergido como una poderosa herramienta para la autoexpresión y la individualidad. 

En este contexto, el punto en común entre todos los tipos de piercing es que implican realizarse una perforación en una parte del cuerpo. Y, para que estos piercings luzcan perfectos, es necesario aplicarles unos cuidados adecuados, con el fin de evitar infecciones o el rechazo del pendiente que se escoja. 

En relación con el último punto, es muy importante elegir con detenimiento el material del pendiente que se vaya a usar, por lo que en este post te aconsejaremos cuál es el mejor material para un piercing con el fin de que puedas determinar el más adecuado para ti (siempre en función de tus necesidades y preferencias). 

¿Por qué escoger un buen material para un piercing?

La moda de los piercings resurge una y otra vez, cíclicamente, popularizando unos modelos u otros en función de las tendencias del momento. Por ello, en un período determinado son más populares los piercings del ombligo, luego los piercings de la nariz y, de repente, estos ceden paso al multipiercing de las orejas. Muchas veces se cae en la tentación de escoger un diseño precioso, original y único para estas perforaciones, siguiendo las tendencias que se ven en las pasarelas y medios, sin tener en cuenta el material del que está hecho. Y esto, al final, puede implicar consecuencias que varían en gravedad.

Seguro que, en alguna ocasión, el lóbulo de la oreja ha terminado de un tono verdoso tras usar unos pendientes. No solo pasa con este tipo de joya, es un ejemplo que se replica al utilizar pulseras, collares, anillos… Esto se debe a la presencia de níquel y/o cobre u otros materiales de baja calidad en la pieza de bisutería, lo que en el mejor de los casos solamente deja esa antiestética mancha verde, fácilmente eliminable con agua y jabón, pero que puede provocar resultados más preocupantes, como una alergia o, peor, una infección.

Si a esta problemática sumamos el hecho de que la perforación está recién hecha, el resultado puede ser desastroso y por este motivo es tan importante escoger un buen material para un piercing. Con ello se evitarán molestias y complicaciones mayores que impliquen la visita a un profesional médico.

Mejores materiales para un piercing

Existen varias opciones de materiales adecuados para un piercing y la elección de unos u otros dependerá de varios factores, como la propia ubicación del piercing, la sensibilidad a ciertos materiales y también la existencia de posibles alergias.

La principal característica que debe tener un buen material de piercing es que sea hipoalergénico (por ejemplo, el oro o la plata), es decir, que no provoque inflamación ni alergia en la piel. También debería ser resistente y duradero, por lo que disponemos de varios ejemplos que cumplen estos requisitos.

Piercing de oro de 18 quilates

El oro de 18 quilates es un material recomendado especialmente para una perforación reciente. Es un pendiente hipoalergénico, sólido y duradero. Aunque ojo, estamos hablando de piezas macizas de oro de 18 quilates, no de bañadas en este material.

Para un primer momento, el oro amarillo es la opción sugerida, pero una vez la perforación esté curada, también pueden escogerse modelos de oro blanco u oro amarillo. 

Piercing de plata de 1ª ley

Los pendientes de plata de 1ª ley también son seguros de usar en un piercing, si bien es cierto que es preferible empezar a colocarlos una vez la perforación esté completamente curada.

Este material ofrece una gran variedad de diseños asequibles y duraderos, pero es necesario revisar las reacciones propias del cuerpo frente a la aleación de la plata.

Otros materiales para piercing

Tanto el titanio como el acero quirúrgico son de las opciones más populares y seguras para utilizar en un piercing, principalmente en el primer momento tras la perforación, lo que ayuda en el proceso de curación. Son resistentes y no provocan alergias, por lo que se pueden escoger con seguridad.

En resumen, se deben evitar materiales de baja calidad que puedan provocar complicaciones en el piercing. Y, si se percibe el menor síntoma de infección, hay que retirar de inmediato el pendiente utilizado y buscar asistencia sanitaria. Por ello, escoger un material de alta calidad ayudará a proteger la perforación y el proceso de curación del mismo. Además, en la actualidad existen una amplia variedad de diseños en materiales adecuados que podrás utilizar con toda seguridad y, al mismo tiempo, lucir a la moda.